El sacerdote jesuita Pedro Oscar González Quevedo, nacido en Madrid, residente en Brasil, era uno de los máximos expertos en parapsicología y tuvo gran popularidad en Argentina en los años 60 y 70. Se dedicaba a explicar fenómenos paranormales -una frase habitual en él por televisión era “eso no existe”- y decía que ciencia y fe no estaban distanciadas.

Una foto de él junto a una niña que levitaba -decía que era un truco- se anunciaba en sus presentaciones y así se publicó en LA GACETA del viernes 6 de septiembre de 1968 (foto abajo, cuando se informaba sobre el dictado de un curso intensivo sobre espiritismo, telepatía, adivinaciones y curanderismo, organizado por el Instituto Tucumano de Cultura Hispánica. Los temas eran: “Ciegos que pueden ver”; “Memoria del inconsciente-¿Recuerdos de existencias anteriores?”; “Hablar lenguas extranjeras sin haberlas aprendido”; “Poseídos por el demonio”; “¿Comunicaciones del más allá?”; “Test científicos de la adivinación. Viajes telepáticos”; “La distancia y la percepción extrasensorial”; “Telepatía sobre el inconsciente excitado”; “¿Apariciones de muertos?” y “Sugestión telepática”. La primera charla fue en el teatro Alberdi (foto principal) pero ante tanta afluencia de público las siguientes se dieron en el club Estudiantes.

Dos años después, en junio de 1971, regresó para otro cursillo, que generó igual fervor.

Autor de libros como “Las fuerzas físicas de la mente”, “Los curanderos” y “El rostro oculto de la mente”, tuvo problemas en Brasil con “Antes de que los demonios vuelvan”, que fue considerado herético y hasta fue quemado hasta que años después fue reivindicado, según publicó Noticias el 14/01/1990.

Recuerdos fotográficos: así fueron los saqueos del 19 de diciembre de 2001

Nacido en Madrid en 1930, González Quevedo falleció en su convento jesuita en Brasil a los 88 años, en 2019.